Cuando varios clubes vienen a fichar a nuestros jugadores…
Cuando jugadores de otros clubes quieren venir al nuestro…
Cuando muchos deciden quedarse sin que les prometamos un Ferrari a los 18…

Algo estaremos haciendo bien.

Y eso que todavía tenemos mucho por mejorar.
Pero tranquilos, Roma no se construyó en un día. Y Les Fonts tampoco. Poc a poc.

Estamos a punto de implantar una metodología única para todo el fútbol base.
No es magia, ni inteligencia artificial, ni el último curso milagroso online.
Pero será nuestra hoja de ruta. Nos ayudará a saber hacia dónde vamos.
¿Los resultados? Claro que importan, pero en su justa medida. Como el azúcar: si te pasas, empalaga.

Lo que realmente nos diferencia es que tenemos espacio y tiempo.
Y no, no hablamos de física cuántica.
Hablamos de algo más difícil de encontrar en el fútbol base: paciencia.

Tenemos más espacio que muchos clubes de la zona.
No necesitamos convertir el campo en un puzle de huertos para jubilados.
Aquí no sembramos tomates, sembramos fútbol.
Y por eso tenemos los equipos justos para el número de jugadores que se quedan y los que llegan.

Espacio para entrenar.
Tiempo para verlos crecer.

No exigimos resultados inmediatos.
Los vamos generando desde la confianza, desde el trabajo diario, desde el “ya llegarán”.

Y sí, a veces esa luz tarda.
Y a veces viene como virutas de caucho que conquistan la casa como hormigas un chupachups en el suelo.
Pero llega. Siempre llega.