❌ Hablar de más
Muchas veces, los padres, cuando subimos al coche con nuestros hijos después de un partido, creemos que debemos comentar cómo ha ido el partido y, en particular, señalar los errores. Pensamos que es el momento de analizar, de repasar qué salió bien o mal. Pero, en realidad, ese es el gran error.
❌ Análisis en el coche
Cuando termina el partido, el coche no debería convertirse en una sala de análisis. Lo único que un padre o madre debe hacer en ese momento es sencillo: conducir, decir algo como «vamos a comer» o «ahora vamos a casa», y poco más.
Si el niño o la niña quiere hablar de fútbol, perfecto, hablamos de fútbol. Si no, no hay que forzar la conversación, y mucho menos repasar errores o aspectos a mejorar.
👂🏼Ponte en su lugar
Piensa en esto: a nadie le gustaría que, al terminar su jornada laboral, al subirse al coche o al tren, su pareja le dijera todo lo que ha hecho mal durante el día. A nadie le sentaría bien que, después de un día duro, le recordaran cada error o le señalaran todo lo que podría haber hecho mejor. Lo mismo le pasa a tu hijo.
👍🏼Conduce y calla
El camino de vuelta a casa es para relajarse, no para corregir. Así que recuerda: calla, conduce y disfruta de la compañía de tu hijo. El resto, puede esperar.

